Foto: Ajuntament de Palafrugell
Palafrugell, con casi 23.000 habitantes y una historia que se remonta al siglo X, es el municipio más poblado de nuestra comarca.
El pueblo creció entorno el antiguo castillo medieval, del cual hoy en día no queda casi ningún vestigio. El casco antiguo, conserva aún su trazado urbanístico medieval, encabezado por la iglesia de Sant Martí y formado por calles y callejones que ahora conforman un gran centro comercial al aire libre.
El máximo desarrollo del pueblo se produjo a finales del siglo XVIII con el inicio de la producción de tapones de corcho, este hecho se ve reflejado actualmente en la arquitectura local, con las fábricas de corcho y los edificios modernistas de la época. Si visitan el Museu del Suro de Palafrugell, situado en la plaza de Can Mario, podrán conocer más a fondo esta industria.
Delante del Museu del Suro encontramos el Depósito Modernista de Can Mario que se utilizaba para abastecer de agua con más presión la fábrica de corcho. Esta estructura modernista, de 30 m de altura ofrece una vista de todo Palafrugell y en un día muy claro, también de todo el Baix Empordà.
Detrás de la torre, se encuentra la Fundación Vila Casas – Museo de Can Mario, un museo de arte contemporáneo que expone obras de artistas escultores nacidos o residentes en Cataluña.
A parte del núcleo principal, forman parte del municipio los núcleos de Llofriu y los núcleos costeros de Calella, Llafranc y Tamariu, antiguos barrios de pescadores que se han convertido en importantes destinos turísticos por la belleza de su situación y por la infraestructura que disponen: alojamientos de todo tipo, restaurantes, servicios diversos… Estos núcleos, que han crecido entorno a las calas, han sabido preservar su tradición y ambiente marineros. Así, durante el verano se puede disfrutar de las cantadas de habaneras, la cantada más emblemática es la de Calella de Palafrugell, que se celebra siempre el primer sábado de julio.
Muy cerca, en Calella de Palafrugell, podrán visitar el jardín botánico de Cap Roig, situado en un paraje de increíble belleza y disfrutar de su camino de ronda bordeando toda la costa.
Otro lugar que no se pueden perder de Palafrugell es la montaña de Sant Sebastià de la Guarda, con su conjunto arquitectónico. (El faro, la torre de guaita, la ermita, la hospedería y los restos de un yacimiento ibérico).
Ya en el interior del municipio, el núcleo de Llofriu guarda la casa pairal de Josep Pla. En la Fundación Josep Pla, ubicada en el centro de Palafrugell, se puede visitar una interesante exposición permanente sobre el escritor, así como objetos personales y sus obras.
Palafrugell tiene un mercado diario (excepto lunes) de frutas, verduras, carne y pescado con más de 100 años de historia y cada domingo se puede encontrar el mercado semanal donde encontraran de todo.
La gran riqueza culinaria del territorio permite la descubierta de dos campañas gastronómicas: Es Niu (octubre-noviembre) y La Garoinada (enero-marzo).
Entorno la festividad del 1 de mayo, no se pueden perder el “Festival Flors i Violes” con actuaciones musicales, decoración de patios y muchas actividades para todos los públicos y entre mayo y junio tiene una cita con las “Festes de Primavera” con el carrousel Costa Brava como final de las fiestas.
En octubre no se pueden perder el Festival de Jazz Costa Brava que llena de ritmo Palafrugell.
Oficina de turisme de Palafrugell
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17200 Palafrugell
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