Una comarca donde el patrimonio aflora en muchos parajes, edificios y manifestaciones que ayudan a entenderlo no solo como pasado, sino también como presente.
Foto: Arxiu d'imatges de l'Ajuntament de Begur
La historia del Baix Empordà se explica por las huellasque, a lo largo de los milenios, han dejado las civilizaciones que se han establecido en este rincón de la Mediterránea. Actualmente, podemos comprender y disfrutar de la cultura de los íberos (Festival Iber d’Ullastret), la vida en la época medieval (Mercados medievales de Calonge, de Castell d’Aro y de Peratallada), la amenaza de los piratas (Fira Piratas y Corsarios de l’Estartit) o la aventura de los indianos (Fira de Indinaos de Begur). Además, no se puede perder la oportunidad de asistir en otros eventos muy arraigados en el territorio, como son la Bandera de Cataluña de Bellcaire d’Empordà o la Processó (procesión) de Verges.
Foto: Ajuntament de Pals
Los oficios tradicionales son el reflejo de la adaptación de las personas en el diverso y fructífero territorio del Baix Empordà. Ya estén vinculadas al campo
(Fiesta del segar y del batir de Pals, Plantada y Siega tradicional del arroz de Pals, Fiesta del Vino Nuevo de Calonge y Feria de Sant Andreu de Torroella de Montgrí), al mar (Festival Terra de Mar), a los bosques (La carbonera de Forallac y la Fiesta de la Saca del Corcho de Llofriu), o bien partan del espíritu creativo de los talleres (Cocida de la rajoleria de Can Frigola y Demostración de torno de cerámica de la Bisbal), estos oficios se mantienen hoy y unifican las innovaciones técnicas con la maestría heredada del pasado.
Foto: ITACACULTURA
El patrimonio musical es un pilar de la cultura en el Baix Empordà. Las canciones populares y de taberna contienen un talento y un carisma que se ha transmitido a los músicos actuales, sean del estilo que sean. Así pues, es imprescindible disfrutar de alguna de las numerosas muestras de habaneras que se celebran en el territorio, como la Cantada d’havaneres de Calella de Palafrugell. Más allá de las canciones y los intérpretes, el panorama musical se completa con las numerosas actuaciones que, año tras año, hacen vibrar los escenarios más emblemáticos de la comarca, con una gran diversidad de estilos, destacando el Festival de Torroella de Montgrí o el Festival de Porta Ferrada de Sant Feliu de Guíxols, entre muchas otras representaciones musicales.
Foto: Lluís Català. Ajuntament de Castell – Platja d’Aro.
Las tradiciones del Baix Empordà se actualizan y se reviven en distintas festividades, tanto el origen religioso como pagano, que se conservan gracias a la colaboración de los habitantes de los pueblos, que dan vida y las abren a la participación de los visitantes. Algunas muestras de estas tradiciones se pueden captar en los pesebres vivientes de Castell d’Aro, de Calonge y de Pals, en cualquier de los carnavales que se celebran por todo el Baix Empordà o en las Fiestas de primavera de Palafrugell.